Época: Islam
Inicio: Año 610
Fin: Año 2003

Siguientes:
El Corán
Los hadices
Los profetas
Los 99 nombre de Dios
El jihad



Comentario

La palabra Islam en árabe quiere decir sumisión, paz, obediencia y, en sentido religioso, sumisión del hombre a la voluntad de Dios, Aláh. Por tanto, el Islam es una religión estrictamente monoteísta, pues proclama la existencia de un solo Dios, Eterno, Omnipotente, Creador, Omnisciente, Omnipresente, etc. Los árabes utilizan el nombre Aláh en lugar de Dios, pues Aláh significa, literalmente, El Dios -Dios único, sin asociados. Así se expresa, por ejemplo, en el Corán: "Dios no ha adoptado ningún hijo ni junto a Él hay dios alguno".
Islam es interpretado también como salvación. Sus fieles son llamados musulmanes, término que proviene del árabe muslim, participio activo del verbo aslama, traducido como "entregarse (a Dios)" y que se refiere a los que "están en el camino de la salvación".

La doctrina islámica fue revelada por Dios a todos Sus profetas (Abraham, Ismael, Isaac, Jacob, Moisés, Jesús...), concluyendo, en el siglo VII, con la revelación hecha a Muhammad(nombre de cuya pronunciación una de las deformaciones más aceptadas es la de Mahoma), a quien encargó predicarla a la humanidad. La revelación, producida entre los años 610 y 632 en la península Arábiga, fue realizada en lengua árabe, siendo su doctrina recogida en un libro conocido como El Corán (del árabe al-Quràn, la "recitación"). El contenido del Corán fue dictado por Dios al Profeta Muhammad a través del ángel Gabriel, siendo considerado, por tanto, la propia palabra de Dios. El hecho de que se piense que la doctrina fuera dictada en árabe es la razón de que esta lengua sea considerada la lengua de culto de los musulmanes.

Junto al Corán, los Hadices, relatos de los dichos y hechos de Muhammad, constituyen una guía para los devotos musulmanes y una fuente importante del pensamiento religioso y legal islámico. Las personas encargadas de interpretar el Corán y los hadices son llamadas ulema ("los sabios"), esto es, eruditos religiosos. Su labor, a lo largo de los siglos, ha dado lugar a un código de regulaciones conocido como sharia, que a su vez dio origen a la ley islámica.

La religión islámica propone que todos los actos realizados por los hombres con la intención de cumplir la voluntad de Dios son un acto de adoración. Sin embargo, estipula también que existen cinco actos específicos de adoración, conocidos como los cinco Pilares del Islam: el Credo, la Oración, el Ayuno, el Azaque y la Peregrinación.